Hay muchos beeps y destellos de luz, es el despertador, siento la cabeza 3 tallas más grandes de lo que la tenía, mi boca sabe a cigarro y vomito, fue una gran noche. Me siento al borde de la cama y observo un cuarto que no conozco, mi ropa esta desbalagada en el piso, hay tres puertas, una lleva al baño, la segunda a la calle, la otra no lo se. Erendira esta en una esquina de cuarto, esperándome tranquila como siempre, como en todos los rincones que la he metido sin objetar nada. Me levanto, voy al baño, observo un espejo y me veo, pero no soy yo. Siento un zumbido, distorsión en mi imagen, un destello ilumina el baño de mala muerte y mi imagen impresionada del espejo se convierte en una secuencia binaria, el espejo se convierte en unos y ceros, se propaga a las paredes, todo a mi alrededor son unos y ceros, yo soy unos y ceros. Mi secuencia binaria se codifica y se hace mi imagen en un espacio blanco infinito, el zumbido sigue ahí y se acrecienta y me siento aturdido. Se detiene el tiempo, enfrente de mis narices esta la puerta que no se a donde me llevara, nos encaramos, carraspeo nervioso, sudo frió.
Press any key.
Mi cara esta en el piso lleno de vomito a un lado del retrete, supongo que es mi propio vomito, mi boca sabe a vomito y mi garganta a ácidos gástricos. Me levanto y salgo el baño, me limpio la cara con una camisa que esta en el piso y voy con Erendira, la acaricio, estaba suspendida y hago que se levante. Me siento enfrente de ella, observo como sus ojos se incorporan, la tomo de la mano y empiezo a jugar. Siento la necesidad, tengo que enchufarme a ella, tenemos que ser uno solo, compartir esa línea de energía. Me abstengo, empiezo a sentirme ansioso, mi flujo nasal cae, no puedo respirar, me levanto rápido y caigo al piso, veo el cable al otro lado de la habitación, me arrastro por el, regreso de pie y busco su entrada, siempre la ha tenido en la parte de atrás, odio que lo tenga en la parte de atrás, siento el portal de entrada, Erendira esta conectada, ahora somos uno.
Press any key.
Siento el placer de cómo fluye una corriente de 110 vatios por mi cuerpo, las pupilas se me dilatan, respiro profundo, siento ese placer que he sentido desde la primera vez que estuvimos juntos, era mi primera vez, y fue con ella, con Erendira, éramos primerizos los dos, nunca habíamos sido conectados por algún otro ente extraño a nuestro sistema. Mi estomago empieza a quedarse entumido por la corriente que fluye como a cuentagotas, me siento en el piso y me recargo en la pared, siento como el cuerpo se me empieza a llenar de sudor, siento que me hace falta la sangre en la cara, me doy unas palmaditas en los cachetes y nos los siento, si funciona. Siento que el piso se mueve, siento que soy capaz de pasar por la puerta que no se a donde diablos me llevara, el cuarto de repente parece mas grande, no me puedo sostener en la pared y me acuesto en el piso. El techo ya no esta, mi mirar atraviesa el edificio, en el piso de arriba esta una mujer joven tomando pastillas como si fuera su comida; en el tercero un gordo en bóxeres de rayitas azules viendo la televisión comiendo palomitas de maíz; después el cielo, el espacio, el infinito blanco.
Press any key.
Nunca nos hemos sido infieles, hasta ahora. Somos el uno para el otro, ella me espera y yo no interactuó con ninguna otra, cuando ha estado enferma yo la cuido y cuando yo enfermo me cuido solo, es una pequeña desventaja de no tener una mujer en casa.
Despierto en el piso y Erendira esta dormida, la dejo descansar. Me visto, tomo el cable, salgo del cuarto y estoy en un edificio de varios pisos, mas de los que pensaba cuando estaba en el viaje, no estoy en el primero, sino en el segundo. Hay muchas puertas que no se a donde llevaran, no solamente en el pequeño cuarto que acabo de conocer existen esas puertas misteriosas. Camino a las escaleras, bajo al primer piso y no es un recibidor, mas bien parece una bodega vacía. Me dirijo hacia la puerta y salgo a la calle. Un barrio que nunca había visto, pero se parecía a mucho de los que ya me había ido: una mierda. Camino calle abajo para buscar un cyber, parece que no hay muchos en este barrio, no me parece raro, quien querría establecer algo así en una colonia que parece estar llena de malandrines que solo infectarían a mis amores. Camino de frente, no doblo en ninguna esquina, es lo mejor que uno puede hacer en un lugar donde no conoce, luego me puedo perder. La acera esta sola de trafico de gente así como la el asfalto de automóviles. Parece estar muerta, sin ningún latido que la haga moverse. El panorama es industrial, pequeñas bodegas y oficinas cerradas, vidrios rotos y polvo añejo. Conforme avanzo el paisaje cambia, una joven pasa caminando a mi lado, un carro pasa lento, mas gente camina y mas carros circulan, ya no estoy en mi barrio de procedencia.
Encuentro un cyber que mas bien parece un drogadero, ya no resisto esas ansias, entro, pido una maquina al chulo, me la concede, me siento enfrente de ella, me presento – hola- ella no dice nada, solo espera las ordenes que yo le daré, como una cualquiera, no como mi Erendira. Se hace llamar “Maquina 5”. ¿Será seguro?, supongo que si, tiene antivirus. Saco mi cable para enchufarme con ella, ser un mismo ser por varios minutos. Siento en mi conciencia que no lo debiera de hacer, alguien me espera en casa. No importa, no se enterara. “Maquina 5” tiene su entrada en la parte de adelante, me facilitara las cosas, la enchufo, me enchufo.
Press any key.
Siento diferente que con Erendira, no disfruto. De repente mi estomago empieza a hacer ruidos, siento que quiero vomitar comida que no he comido aun, siento que mi entrada arde, respiro hondamente, mi vista se nubla, me desconecto. Me siento mal, mi cabeza da vueltas, el piso se mueve y me retumban los oídos.
Me levanto con fiereza y salgo corriendo hacia mi cuarto con una puerta desconocida, no paro por ningún motivo. Empieza a haber menos gente conforme avanzo, ¿o retrocedo?, ¿a quien le importa cuando sabes que hiciste algo mal y quisieras arrepentirte? Llego a la puerta por la que salí hace un tiempo, subo las escaleras que baje, corro a la puerta por la que salí, entro por ella, me desfallezco en cuanto cierro la puerta, como si me desconectaran, en un espacio infinito blanco.
Press any key.
Me despierto después de quien sabe cuanto tiempo en el piso boca arriba, siento que todo es diferente, pero lo único que falta es Erendia, se ha dado cuenta y me ha dejado. Siento un vacío en mi, ¿Qué será de mi ahora? Ya nadie me esperara en casa. Palpo mi entrada, ya no tiene la misma consistencia, se siente blanda, percibo un hedor horrible de él. Estoy jodido. Me levanto, ya no tengo nada que perder, encaro la puerta que no se a donde me llevara, carraspeo nervioso, sudo frió, mi mano toma la perilla, tiemblo, le doy vuelta lentamente, respiro hondo, siento un zumbido en mi cabeza, se distorsiona mi imagen, todo empieza a hacerse una secuencia binaria paredes, piso, techo, todo, menos la puerta y yo, estamos en un espacio infinito blanco, empieza a temblar, grito, abro la puerta. Destello.
Press any key.
Parpadeo como siempre, soy rojo como siempre, soy una luz como siempre, hago beep como siempre, solo fue un mal sueño.